Una ruptura amorosa puede deprimir a las personas. A Joe Metheny, por ejemplo, le motivó a convertirse en un asesino en serie y vender la carne de sus víctimas en un puesto de hamburguesas.
Metheny, de 40 años para ese entonces, parecía un hombre común de la ciudad de Baltimore, Maryland. Era hijo de padres trabajadores con sueldos mínimos y actividades normales, una esposa y trabajo estable, según publicó El Clarín.
Joe Metheny: asesinaba personas y vendía hamburguesas con la carne de sus víctimas
El estadounidense tenía una gran adicción a las drogas. El uso de dichas sustancias hizo que su mujer lo abandonara, aunque ella también tenía problemas con los estupefacientes, pero quizás lo que más le dolió a Metheny fue separarse de su hijo de seis años. No supo más de él hasta seis meses después.
El golpe más duro, vino cuando descubrió que su familia estaba viviendo con la persona que le proveía drogas a él y, tiempo después, las autoridades pusieron en adopción al niño bajo el cargo de negligencia y abuso infantil. Atormentado, Joe culpó a su exmujer de perder al menor y perdió los estribos.
Asimismo, el hombre buscó venganza en la muerte de un grupo de personas que frecuentaba su expareja. Sus primeras víctimas fueron dos distribuidores de drogas en situación de calle. Los asesinó debajo de un puente y escondió sus cuerpos.
Su siguiente víctima fue una prostituta adicta al crack. Su esposa era adicta a esta sustancia y luego de perder la custodia de su hijo, estaba desaparecida, y buscando información sobre ella, violó a la mujer y luego la asesinó, cortándola en pedazos.
Modus operandi de Joe Metheny
Luego de esto, Joe Metheny cometió un crimen tras otro. Mayormente mujeres en situaciones deplorables, especialmente prostitutas, eran sus víctimas.
Su modus operandi era contactarlas, citaba en su casa, luego abusaba de ellas y finalmente las mataba.
Sin embargo, la aberrante acción de Metheny no llega hasta ahí. El hombre decidió mezclar la carne de sus víctimas con carne de cerdo e hizo hamburguesas que luego comenzó a vender en un puesto callejero.
Según sus declaraciones, él comió de esa carne, como si se tratase de una res normal, en más de una ocasión.
Así dieron con Joe Metheny
La última víctima fue secuestrada el 8 de diciembre de 1996. Se trataba de Rita Kemper, quien consiguió escapar un momento antes de que el criminal intentara violarla e hizo la denuncia.
Rápidamente los policías llegaron al remolque donde Joe vivía y lo arrestaron. No le quedo más que confesar.
Metheny contó cada uno de sus atroces crímenes y aseguró que había matado al menos a una decena de personas. Según su abogado, la culpa de su comportamiento se debía al uso abusivo de las drogas y alcohol.
Sin embargo, muchos de sus crímenes no pudieron ser comprobados, como el de Randall Brewer y Randy Piker. Ambas eran personas sin hogar y no había suficientes pruebas para culparlo.
Joe Metheny fue condenado a doble perpetua a los 40 años en 1996 por los homicidios de Cathy Ann Magaziner y Kathy Spicer, dos de sus tantas víctimas.
El aberrado estadounidense fue encontrado muerto en su celda en la Institución Correccional Occidental en Cumberland, Maryland, el 5 de agosto de 2017, a la edad de 62 años. Las causas de su fallecimiento son desconocidas.
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