Murió Francisco “Morochito” Rodríguez, boxeador venezolano que logró traer la primera medalla de oro para Venezuela en los Juegos Olímpicos de México 1968. Se conoció del fallecimiento en horas de la noche del martes 23 de abril.
El boxeador murió en el Hospital Militar de Caracas donde fue internado luego de que se le registrara una anemia que, de forma progresiva, fue agravándose, según reseña Meridiano.
En el centro de salud estuvo en observación durante varios días hasta que falleció.
El ministro de Deportes, Mervin Maldonado, informó por medio de las redes sociales el deceso de “Morochito” y dijo que Venezuela siempre estará orgullosa de los logros deportivos alcanzados por el pugilista retirado. Sin embargo, no indicó la causa de su deceso.
Además, indicó que el velatorio de “Morochito” se realizará en la funeraria Vallés este miércoles hasta la 1:30 pm para luego trasladar sus restos mortales a la sede del Instituto Nacional de Deportes y rendirle honores desde las 2:00 pm.
‘Morochito’ Rodríguez es uno de los cuatro medallistas dorados en los Juegos Olímpicos representando a Venezuela. Junto al taek-won-doka Arlindo Gouveia, el esgrimista Rubén Limardo y la saltadora triple Yulimar Rojas.
Francisco “Morochito” Rodríguez el primer oro olímpico de Venezuela
Rodríguez nació Cumaná el 20 de septiembre de 1945 y siendo el segundo mayor de catorce hermanos. Rodríguez adoptó el apellido de su madre, Olga Margarita Rodríguez después de que su padre abandonara a su familia.
A los once años, se interesó por la actividad boxística, mudándose de la capital sucrense a la ciudad de Caracas a los pocos años de iniciar su carrera.

En 1967, tendría su primera gran oportunidad en los Juegos Panamericanos, llevándose la medalla de oro, presea que repetiría en la siguiente edición.
Un año después de ganar su primera medalla panamericana, disputaría los Juegos Olímpicos en México. Donde derrotaría al estadounidense Harlan Marbley en semifinales y al surcoreano Yong-Ju Jee en la final para darle a Venezuela su primera medalla de oro olímpica.

El triunfo de Rodríguez no solo fue un logro personal, sino un hito para Venezuela y el deporte nacional. El boxeo venezolano encontró en “Morochito” a un ícono, un verdadero héroe que inspiró a las futuras generaciones de pugilistas.
Su legado trascendió las fronteras del boxeo, convirtiéndose en un referente para todos los atletas venezolanos.