Poco a poco, el complejo de piscinas olímpicas Rafael Vidal de Maracaibo se hunde en medio de basura, agua podrida y maleza. Las promesas de recuperación se quedaron a la deriva, aún cuando el gobierno nacional adjudicó recursos para el rescate de las instalaciones.
El complejo de piscinas olímpicas está ubicado dentro de las áreas que pertenecen al Polideportivo Luis Aparicio Montiel en Maracaibo.
Toda el área deportiva se inauguró en 1968 para la cuarta edición de los Juegos Deportivos Nacionales, con un costo de 36 millones de bolívares.
Ahora, las piscinas olímpicas forman parte de un juego sucio y perdido, donde la desidia y el abandono van ganado. Lo peor es que los deportistas carecen de espacios idóneos donde desarrollar sus actitudes.
El compromiso de Omar Prieto quedó bajo el agua
Desde julio de 2018, Omar Prieto prometió la recuperación del Complejo de Piscina Rafael Vidal del Polideportivo de Maracaibo.
Para este momento, la tarea estaba a cargo de la Gobernación del Zulia, en conjunto con el Comité Olímpico Venezolano, el Ministerio del Deporte y el Instituto Nacional de Deportes.
Renny Valero, secretario de deportes del Zulia para la fecha, aseguró que a partir de ese momento se iniciaban los trabajos de recuperación de las piscinas.
El primer paso era la evaluación del área, por parte de un equipo de ingenieros y arquitectos dirigidos por Ramón Rivera de la dirección de infraestructura de la gobernación.
Luego, entregarían el diagnostico al los entes nacionales de Deportes, quienes aprobarían el presupuesto. Según Velero, este era otro compromiso asumido por Prieto.
Se estimo que la obra podría intervenir las piscinas, el cuarto de bombas y las áreas administrativas.
En mayo de 2019, Valero, anunció los trabajos habían comenzado desde abril y que se concluiría en unos dos meses. Jamás se hicieron esas obras.
Piscinas olímpicas de Maracaibo: historia de promesas
La última inversión en el complejo de piscinas olímpicas Rafael Vidal fue en 2011. Con siete millones de bolívares el Ministerio del Deporte puso en funcionamiento el área.
Fue en ese momento cuando el complejo se renombró “Rafael Vidal” en homenaje al fallecido medallista olímpico venezolano.
En julio de 2016, el Ministerio del Deporte prometió invertir 177 millones de bolívares y 35 mil dólares, para reabrir el complejo de piscinas Rafael Vidal para septiembre de ese año.
Los recursos, provenientes del Fondo Nacional para el Deporte, se destinarían para cambiar las bombas y el sistema eléctrico de la sala de máquinas de la piscina olímpica y la fosa, entre otros acondicionamientos.
Nadando en la miseria ¿Hasta cuándo?
En febrero de este año, el complejo de piscinas volvió a ser noticia. Aunque el estado deplorable del “Pachencho Romero” arropó la maltrecha situación del área de deportes acuáticos.
Para la fecha, fueron los miembros de la subcomisión del Ministerio para la Juventud y el Deporte, Ricardo Useche y Samy Reyes, quienes constataron el grado de abandono del complejo.
Useche responsabilizó a las “malas políticas implementadas durante los últimos años en la región. Pese a que en años recientes se aprobaron recursos”.
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